Años después compartí un hámster con la Viviana. Pero estuvo solo una noche en mi casa. No hubo autorización paterna para más. Yo siempre soñé con tener un gato y estoy tan contenta de que seb también que me conmuevo. Fuz fue descubierto en una veterinaria, donde lo habían dejado luego de encontrarlo vagando solo. Lo vi, lo tomé y se quedó tranqulito y feliz en mis brazos. Fuz ya existía desde antes en mi mente y en mi vida con seb: era mi mascota imaginaria. Aunque yo lo pensaba gata y terminó siendo gato.
Aquí pueden verlo en su primer día en nuestra casa imitando a su juguete favorito: serpiente.
5 comentarios:
Aggggg... yo sé lo que significa querer un compañero así y no poder tenerlo. Ahora extraño a Roco, lo extraño mucho y no lo puedo ni siquiera visitar.
Roco no era mi mascota, no interactuàbamos: nos queríamos, nos apapachábamos, hablábamos.
Recuerdo que a veces mi ex marido me decía: Regañé a Roco por tal... y yo preguntaba, de lo más normal: ¿Y qué te dijo?
A veces hablábamos en inglés o en clave para que èl "no entendiera" lo que decíamos sobre èl...
Roco es una parte de mi vida muy importante, quizá una de las más importantes de mí...
Tienes razón en eso. Los animalitos parten siendo mascota y terminan convirtiéndose en amigos entrañables, en familia.
Hola!
Gracias por invitarme a compartir este espacio.
Que rico es que haya llegado Fuz a compartir sus vidas... un integrante mas de tu linda familia.
Nunca olvidaré tus ojitos al saber que existía Fuz, como si lo hubieses estado esperando, justo a él.
Besitos.
este es el gato volador?
jijjiijij
Sí, es el gato voladorrrrrrrrrr
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